¿Me saldrá bien?...es que me pongo en tensión...no tengo pulso...son algunas de las expresiones que se oían en el comienzo.
Poco a poco nos fuimos concentrando en nuestra pequeña obra.Con observación y paciencia nos fuimos adentrando en lo que el artista nos transmitía, en los colores que utilizaba, en las mezclas que conseguía y ¡claro que va saliendo ese pequeño artista que todos llevamos dentro!
Esperemos que los resultados finales nos dejen satisfechas. Por el momento nos ha servido, junto a la música que pusimos de ambientación, para tener una tarde muy relajada e inspirada.
La próxima semana colgaremos los cuadros ya terminados.